No todas las reservas de vivienda que se realicen en 2025, a tasas subsidiadas por el Estado al 4,99 %, podrán ser atendidas. El fideicomiso que sirve para financiar este programa habitacional de a poco se agota, apenas tiene recursos para un año.
Desde el 2015, el Estado ecuatoriano implementó un sistema de subsidio a las tasas de interés que se cobran por créditos hipotecarios a la población más vulnerable que busca acceder a una vivienda.
En el 2019, este programa fue estructurado con fondos que alcanzaron los 540 millones de dólares, de los cuales apenas restan $ 105 millones.
La sostenibilidad de este programa, que financia casas de menos de $ 100.000, es parte de las principales preocupaciones que tiene el sector inmobiliario, pues agrava el problema de financiamiento que ya tiene este mercado.
Gran parte de esta caída se atribuye al desestimulo que ya tienen los bancos de colocar créditos en este sector, atados a un techo de tasas, que no les permite cobrar al real costo del mercado.
Según las cifras del Banco Central del Ecuador (BCE) hasta octubre, el Sector Financiero Privado colocó $ 681 millones, un 17,7 % menos. Si a eso se le suma el crédito con tasas subsidiadas por el Estado (al 4,99%), dice, la colocación alcanza los $ 885 millones, un 11 % menos.