Una escena de locura y descontrol se vivió este domingo en el estadio de Gremio de Porto Alegre. Los hinchas del Tricolor no se bancaron la caída por 3-1 ante Palmeiras y se metieron en la cancha a romper todo. Y, en medio de escenas de vandalismo absoluto, terminaron destrozando la cabina del VAR.
El VAR tuvo participación en decisiones clave durante el partido. Primero determinó el penal del 1-1 de Palmeiras -bien cobrado- y luego anuló por offside lo que hubiera sido el 2-2 parcial del equipo de Porto Alegre.
En el medio del escándalo, hubo peleas entre los hinchas de ambos equipos a través de los acrílicos que los separaban. Además, Raphael Veiga (volante de Palmeiras) se encontraba dando una entrevista para la televisión en el campo de juego y debió abandonar corriendo el campo de juego por la invasión de los violentos del gremio.
Gremio se encuentra en un momento crítico en lo deportivo. Penúltimo en el Brasileirao, en este momento está en zona de descenso. Le faltan jugar nueve fechas y debe descontarle siete puntos al 16°.
A Gremio se le puede venir una dura sanción. El miércoles visitará a Atlético Mineiro, el líder del Brasileirao. Mientras que el Palmeiras quedó nuevamente segundo del certamen, detrás del conjunto de Nacho Fernández.
